Biografía del Profeta y sabio Michel de Nostradamus



El mundo era violento y duro; la tiranía y las injusticias sociales se mezclaban con el surgimiento de grandes pensadores y personajes que antepusieron sus descubrimientos e ideales con su propia vida. La inquisición comenzaba a alargar su sombra cuando en Saint-Rémy de Provence en el sur de Francia, surgiría una Luz que seguiría brillando pasados quinientos años de su nacimiento. Fue en una humilde casa situada en el Nº 6 de la calle Hoche; sería en esta localidad, donde fue alumbrado uno de los mayores profetas de la historia, Michel de Nostradame. Sus pequeños ojos se abrieron en 1503 sobre el mediodía, cuando el Sol reinaba con más fuerza en el firmamento. Sus padres fueron Jaime (o Jacques) de Nostredame, y Reynière (o René) de Saint-Remy. Se cree que su descendencia era hebrea y que eran descendientes de la tribu de Isacar, como según su propio hijo Cesar relataría más tarde en L'histoire et chronique de Provence, en Lyon el año 1614.

Su familia vivía un poco más desahogada que las demás familias de aquel tiempo. Su comodidad y su relativo estatus social pudieron haber venido por ambas partes, ya que sus abuelos paternos y maternos, eran profundos conocedores de las ciencias matemáticas y de la medicina. Como médicos, uno vivió en la Corte de René, que además de Conde de Provenza, era Rey de Jerusalén y de Sicilia; y el otro, en la Corte de Juan, Duque de Calabria e hijo del antedicho René. Desde pequeño no fue uno más de sus once hermanos. La creencia más repetida es que su abuelo Juan de Saint-Remy le eligió para ofrecerle sus conocimientos fueren cuales fueren. En el libro mencionado anterior mente de su hijo Cesar, se insinúa que su abuelo descendía de la nobleza regional y que era el último representante de los caballeros de Saint-Rémy, concretamente de Richard de Saint-Rémy, sobrino de Quiquerau de Beaujeau. Después de la muerte de su abuelo y maestro Juan de Saint-Rémy (su pista se pierde en los registros sobre 1504), Nostradamus fue enviado a Aviñón en 1518-19, con 15 ó 16 años para cursar sus estudios. Allí aprendería diversas lenguas y medicina, y comenzaría a experimentar con pociones curativas. Su tía Margarita le daría cobijo en esos días. Pero lamentablemente, tan solo un año después, Nostradamus tendría que dejar esta localidad debido a un brote de peste. Durante un periodo de tiempo ejercería como boticario. En 1520 obtendría el título de “Maestro de las Artes” y en 1528 se enfrentaría por primera vez en Narbona, Tolosa y Burdeos a la peste ayudando a su erradicación. Este hecho le pudo haber inducido a inscribirse en la prestigiosa Universidad de Montpellier en 1529 para cursar sus estudios de medicina, que nuevamente tuvo que posponer por culpa de la aparición de la peste. Cuando Montpellier quedó liberada de la epidemia de peste, regresó a esta ciudad, donde por fin obtuvo el título de doctor. (Los últimos estudios niegan que consiguiera dicho título y que fue expulsado poco después cuando fue descubierto que había sido Boticario, una actividad expresamente prohibida por el estatuto de la universidad). El documento de expulsión (BIU Montpellier, Registro S 2 folio 87) todavía existe en la biblioteca de la facultad. Pero no seré yo quien le niegue tal título; a estas alturas se sabe que con titulo o sin el, ejerció muy sabiamente como Doctor salvaguardando muchas vidas.

Sobre 1531 ó 1533 Nostradamus estaba en Agen trabajando como médico a domicilio cuando recibió una invitación de quien sería uno de sus mejores amigos, César Scaliger. Éste fue un gran erudito del renacimiento y sus conocimientos eran muy variados, desde la astrología y la medicina, a las ciencias oscuras en aquel tiempo perseguidas. Scaliger aportaría a Nostradamus nuevos conocimientos, que junto a los que ya adquirió por medio de su abuelo Juan de Saint-Rémy, le harían crecer hacia lo que hoy es. No está muy claro si se casó en Agen por primera vez con Magdalena en 1531, o lo hizo por medio de Scaliger en Toulouse en 1533. El caso es que se quedó a vivir un tiempo en Toulouse, en la casa de su nuevo amigo y junto a su nueva esposa, la cual le daría sus dos primeros hijos.

Pero, no todo pintó bien para Nostradamus; la Inquisición recelosa de la aclamada fama de ambos sabios comenzó a estudiar sus movimientos y no tardó en condenar su supuesta herejía. Ambos serían acusados de poseer libros de brujería entre otras cosas. Nostradamus viendo el panorama se vio obligado a marcharse dejando a su mujer e hijos para evitarles más problemas. Estaría vagando por pueblos y ciudades ofreciendo sus ungüentos y su saber hasta en 1534-35, que llegaría a sus oídos que en Agen había brotado la peste. Inmediatamente regresó a la ciudad donde dejó a su familia, pero sus ojos se mojaron con lágrimas al ver que cada uno de ellos estaba infectado con la cruel enfermedad. Finalmente, todos morirían casi en sus brazos sin que él tuviera la oportunidad de hacer nada por ellos, como hizo y hará por tantas otras personas anónimas futuras. Nuestro amigo, perdido y entristecido quizás aquí y en ese momento, se dio cuenta del poder de las enseñanzas de su abuelo y del poder de predecir el futuro. Se preguntaría el resto de su vida, ¿por qué no lo vio antes?, ¿por qué no lo entendió? A partir de entonces, Nostradamus se volcaría en una vida esotérica, mística y espiritual que le llevaría a intentar hacer lo que no fue capaz con su mujer e hijos, salvar al mundo de los posibles cataclismos y desventuras. “En 1545 escribiría los jeroglíficos de Orus de Apolo. Un manuscrito de su puño y letra existente en Lyon en la biblioteca municipal”. Se marchó de Agen y regresó a Francia; se creé que permaneció un tiempo en la abadía de Orval, en la provincia de Luxemburgo, en Bélgica, que dependía del orden de Cîteaux. Luego en Lyon en 1547, en Viena, Valencia, Marsella, Aix en Provence, etc. Nostradamus en 1544-45 se unió a Luís Serré en la lucha de la enfermedad de la peste en Marsella, y luego abordó brotes adicionales de la enfermedad el sólo en Salon de Provence y en Aix en Provence en 1546, floreciendo sus dotes de doctor, boticario y su sabiduría. Mandó quemar a los muertos incluyendo sus ropas, matar a las ratas que esparcían la enfermedad, adecuar la higiene de los lugares donde eran atendidos los enfermos, usar máscaras de cuero para evitar la infección, y usó con éxito sus ungüentos como tratamientos efectivos, dando a conocer sus conocidas pastillas de pétalos de rosa. La epidemia remitió y fue venerado su trabajo como médico y sus ideas revolucionarias sobre la forma de tratar las enfermedades. Esto le proveería de importantes beneficios monetarios. Decidió regresar a Salon, donde conocería a Ana Ponsarde, la viuda rica de Juan Beaulme, con la que en poco tiempo se casaría,  haciendo de Salon de Provence, su última residencia. La ceremonia matrimonial se celebró el 11 ó el 26 de noviembre de 1547, debido a su ya engrandecida fama y a la descendencia noble de su mujer, asistieron a la boda muchos nobles y gente influyente, que sin duda, le valdrían en algún momento como apoyo para los próximos proyectos que Nostradamus tenía en mente. De esta unión surgieron seis hijos que le harían la vida más alegre y llevadera. Sus nombres eran:

 

Magdalena

1551-1623

Cesar

1554-55-1630

Carlos

1556-1629

Andrés

1557-1601

Ana

1558-1597

Diana

1561-1630

 

 

 

 

 

 

 

En 1550 comenzaría a escribir sus primeros Almanaques anuales repletos de datos astrológicos y proféticos. Según algunos estudiosos, aquí por primera vez, firmaría con el nombre latinizado de Nostradame a Nostradamus, aunque otros creen que comenzó a hacerlo en la Universidad de Montpellier sobre el 1530. Todavía se conservan algunos Almanaques, las copias de 1557 y 1563 están en la biblioteca de Arbaud Durante sus viajes por Italia, conocerá los poderes curativos de las mermeladas y de las compotas; interesándose por la alquimia vegetal. Esto le llevaría más adelante a realizar su propio libro sobre el tema en 1555, denominado “Tratado de las confituras”. (Actualmente en la biblioteca municipal de Lyon).

 

 

Nostradamus vivió hasta su muerte en la casa de su esposa Ana en Salon de Provence, donde haría construir su estudio en la última planta. En este lugar decidió ir más allá y dirigir sus profecías a gentes de tiempos tan lejanos que aun hoy cinco siglos después no han llegado ni a nacer. Él sabía que esto sería una osadía y más en aquellos tiempos donde lo no conocido pasaba a ser diablesco y blasfemo. Decidió publicar estas profecías a sabiendas de que su gran fama acrecentada por sus éxitos medicinales y sus Almanaques, le podrían permitir el lujo de editarlo más cómodamente.

Finalmente, las cuatro primeras Centurias incluyendo una carta en teoría dedicada a su hijo Caesarem (Cesar) serían publicadas en Lyon por Macé Bonhonmme en 1555.

Antonio de Rosne publicaría en 1557 otra edición que contendría hasta la centuria séptima y en 1568 (después de su muerte) se publicaría por medio de Benoist Rigaud en Lyon la versión definitiva que contendría las diez centurias completas, incluyendo una carta dirigida a Enrique II. Desde entonces hasta hoy, hay tantas ediciones y publicaciones de este trabajo que casi es imposible saber cual es su número exacto. Debido al éxito alcanzado con sus Centurias proféticas, y que una de ellas (1-35) se podría referir a la muerte del propio rey Enrique II, Nostradamus recibió una invitación en 1556 para ir a Paris, más bien, por parte de Catalina de Médeci que por parte del rey. En palacio entablaría una buena amistad con la reina; consiguiendo aún más credibilidad y su apoyo incondicional. Su estancia sin embargo, no fue muy gustosa ya que los primeros síntomas de su enfermedad le mantuvieron postrado en la cama por lo menos quince días. Al regresar a Salon reanudó su vida de siempre; pero su fama había crecido hasta tal punto que príncipes y reyes, ricos y poderosos, acudían a él para interrogarle sobre los acontecimientos futuros. La leyenda ya estaba hecha. Miguel tuvo un último altercado con la iglesia en 1561 que le mantuvo encarcelado en Marignane por haber publicado en 1562 un Almanaque sin permiso previo del Obispo como era requerido por un nuevo decreto real. Carlos IX, lo hará nombrar su médico y consejero en 1564, así Nostradamus llegó a lo más alto como anteriormente lo hicieron sus antepasados.

Finalmente, nuestro amigo Miguel de Nostradamus se encontraba cada vez más cansado y débil por el avance de su enfermedad. A finales de junio, hizo llamar al notario Roche para redactar su testamento, que se encuentra en la biblioteca municipal de Lyon. Casi con toda seguridad la causa de su muerte pudo ser por gota y una insuficiencia cardiaca que le provocaría la muerte el 2 de julio de 1566 en Salon de Provence por un edema cardiopulmonar, a la edad de sesenta y dos años, seis meses y diecisiete días.

 


 

Fue sepultado en la capilla Franciscana local (parte de ella ha sido incorporada al restaurante La Brocherie), pero tras la Revolución francesa, sería trasladada a San Laurent Collégiale, donde su tumba permanece hoy en día.

Leyenda en latín:

Aquí descansan los restos mortales del ilustrísimo Michel de Nostradamus, el único hombre digno, a juicio de todos los mortales, de escribir con pluma casi divina, bajo la influencia de los astros, el futuro del mundo.

Una de las últimas personas en ver brillar la luz de Nostradamus fue su discípulo Juan de chavingy, que le encontraría yaciendo muerto al lado de la cama y un banco, como él mismo nos reveló, para mostrar de nuevo que no era un charlatán.

 

Presagio 141.

Tras un encuentro diplomático el regalo del rey será puesto en su lugar.

Él no hará más estará cerca de Dios.

Parientes más cercanos, amigos, hermanos de sangre.

Lo encontrarán muerto cerca de la cama y el banco.

 

Pero en este momento triste, podemos recordar que Michel Nostradamus tiene el mismo concepto de la muerte que los primeros Cristianos; él llama a esto "el Día del Nacimiento" Muere Natalis.

 


 

ESTROFA DE CUATRO VERSOS II.133

El Corp. de Le sans ame más n' estre en sacrifica,

Iour de la toque de muerte mis en nativité:

L' esprit divin fera l'ame felice,

Voiant le verbe en fon eternité.

 

El cuerpo del alma santa ya no está en sacrificio,

El día de la muerte es como el nacimiento:

El espíritu divino hará al alma feliz,

Viendo "el verbo" en su eternidad

 

Recientemente en 1982, fue descubierto en la Biblioteca Nacional Central en Roma por la Sra Enza Massa, un CÓDICE ilustrado del siglo XVII, con el título "Vaticinia M. Nostradamis de futuri Christi Vicarii ad Caesarem filium". Este manuscrito está compuesto de imágenes sobre profecías de Papas. La biblioteca atribuye este códice a Nostradamus. Dicho códice, está acompañado con una tarjeta bibliográfica escrita por padres Cartesianos que dicen que, el escrito a mano fue enviado como un regalo en 1622 por el primer hijo de Nostradamus a Maffeo BARBERINI, que en 1623 fue proclamado Papa con el nombre de URBANUS VIII. (Papa Urbano).